El general, ahora en condición de retiro, Roosevelt Hernández abandona la institución militar luego de la solemne ceremonia de traspaso de mando de las Fuerzas Armadas, gestión que estuvo marcada por decisiones y manifestaciones verbales que, más de alumbrar, tiñeron de tonos grises su administración.
Hernández, quien deja su puesto al general Benjamín Valerio, sale del Estado Mayor Conjunto y de su jefatura con distintas denuncias por palabras mayores contra sectores como los medios de comunicación y en otros casos contra la empresa privada, con señalamientos constantes de contar con una “línea partidaria” bajo la bandera del Partido Libertad y Refundación (Libre).
Agradeciendo a su familia, sus compañeros y a la institucionalidad hondureña, el exjefe del Estado Mayor Conjunto se marchó de la institución castrense con lo que manifestó ser su “frente en alto”, recordando su trayectoria dentro de la fuerza militar y todo lo que su familia le encomendó, mediante su amor y cariño, para dirigir la milicia nacional.
“No llevo ningún resentimiento con ningún periodista, que públicamente irrespetaron mi persona y la institucionalidad que representamos, irrespetaron mi familia, que públicamente quisieron hacerme actuar a su antojo”, manifestó.
“Ha llegado la hora del retiro, por lo que invito a la 27 promoción, desde donde están, a gritar unísonamente, a la cuenta de tres: misión cumplida”, finalizó.

