En medio de las redadas migratorias anunciadas en New Orleans, Estados Unidos, familias hondureñas se han organizado para llevar alimentos a connacionales que, por temor a ser detenidos, no pueden salir de sus viviendas ni siquiera para comprar productos básicos.
Una de las iniciativas es liderada por una familia hondureña residente en la ciudad, que ha logrado recolectar y distribuir gratuitamente al menos 60 bolsas de alimentos y artículos de primera necesidad a familias vulnerables. Iván Orellana, uno de los impulsores, explicó que muchas solicitudes de ayuda llegan a través de redes sociales y que el apoyo se ha brindado con recursos propios y donaciones.
A esta labor solidaria se suma el hondureño Danny Cruz, quien junto a su iglesia ha realizado jornadas de entrega de canastas de comida a domicilio, beneficiando a decenas de familias migrantes. Ambos hicieron un llamado a la solidaridad y recomendaron a la comunidad hispana permanecer en casa mientras persista la incertidumbre migratoria e invita a quien desee unirse a la causa para ayudar a madres solteras a las cuales sus esposos han sido deportados recientemente.

