Las exequias del activista ultraconservador Charlie Kirk, asesinado el 10 de septiembre, comenzaron este domingo en el Estadio State Farm de Arizona ante más de 73.000 asistentes, con una pompa comparable a la de un funeral de Estado.
La ceremonia, que inició con cánticos evangélicos y una interpretación de Gracia divina frente a un enorme retrato de Kirk, contó con la presencia de líderes religiosos, políticos y figuras de su organización Turning Point, quienes elogiaron su papel como impulsor del conservadurismo estudiantil.
El presidente estadounidense Donald Trump encabeza la lista de oradores, acompañado por el vicepresidente JD Vance, el secretario de Estado Marco Rubio, el secretario de Defensa Pete Hegseth y la viuda del activista, Erika Kirk, quien asumió la dirección de Turning Point.
Kirk, de 31 años, fue asesinado de un disparo mientras participaba en un debate en la Universidad Utah Valley, convirtiéndose en una figura mártir para el ultraconservadurismo nacionalista de Estados Unidos.
