El Gobierno chino pidió a Estados Unidos que ponga fin a lo que calificó como “coacción” hacia los países latinoamericanos y respete su derecho a decidir libremente sus vínculos exteriores.
El portavoz de Exteriores, Lin Jian, afirmó que Washington recurre a políticas de “presión y coerción cada vez menos viables” y subrayó que la cooperación entre Pekín y América Latina se basa en la “igualdad, apertura y beneficio mutuo”.
“América Latina y el Caribe no son el patio trasero de nadie”, advirtió Lin, al tiempo que instó a Washington a dejar de interferir en los asuntos internos de la región y aportar hechos concretos para su desarrollo.
Medios como The Economist y The New York Times revelaron que EE. UU. ha intensificado este año presiones diplomáticas, comerciales y militares para frenar la influencia china, aunque con resultados limitados que, en algunos casos, han fortalecido los lazos de la región con Pekín.

