Un tribunal federal de apelaciones de Estados Unidos ha impedido que el presidente Donald Trump siga amparándose en la Ley de Enemigos Extranjeros, un estatuto de tiempos de guerra del siglo XVIII (18), para deportar rápidamente a inmigrantes venezolanos.
Fue un panel de tres jueces de la Corte de Apelaciones de Estados Unidos para el Quinto Circuito que tomó la decisión, tras una votación de 2-1.
El fallo representa un revés para la administración de Trump y su política de deportación masiva de inmigrantes.
La ley se estaba aplicando en el caso de migrantes acusados de pertenecer al Tren de Aragua, una organización narcocriminal con raíces en Venezuela.
El tribunal concluyó que no existía evidencia de una ʺinvasión o incursión depredadoraʺ por parte de una potencia extranjera que justificara el uso de la norma.
El caso es considerado una prueba clave sobre cómo los tribunales evaluarán el uso por parte de Trump de la Ley de Enemigos Extranjeros, un estatuto de guerra que rara vez se invoca, para acelerar la deportación de inmigrantes.
ʺEsta es una enorme victoria para el estado de derechoʺ, afirmó Lee Gelernt, abogado de la Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU), organización que defendió el caso. ʺDeja claro que el presidente no puede simplemente declarar una emergencia militar y luego invocar los poderes que quieraʺ, concluyó.

