Lo que parecía una amistad terminó en un crimen atroz en San Pedro Sula. Un joven universitario de 18 años fue detenido como principal sospechoso del homicidio de su compañero de estudios, Darwin Antonio Bueso Hernández, reportado como desaparecido por su familia y cuyo cuerpo fue hallado en el sector de Chamelecón.
El caso salió a la luz cuando las autoridades localizaron una camioneta gris, sin placas, que había sido abandonada. Tres personas fueron capturadas al intentar trasladar el vehículo, y uno de ellos confesó haber participado tanto en el robo como en la muerte del propietario.
De acuerdo con la investigación, Bueso salió con su supuesto amigo rumbo a un balneario en Cofradía, donde posteriormente recogieron a otro sujeto. En ese trayecto se activó un plan previamente organizado para despojarlo del vehículo. Al resistirse, el joven fue estrangulado hasta morir.
Su cuerpo fue amarrado con piedras y arrojado al río Chamelecón con la intención de evitar que flotara. Horas después, los investigadores vincularon la desaparición reportada por la familia con el hallazgo del automotor, lo que permitió capturar a los sospechosos en un corto tiempo.
Las pesquisas señalan que el crimen había sido planificado desde semanas atrás, pues el principal acusado, considerado amigo cercano de la víctima, habría ideado apropiarse del vehículo. Ahora deberá enfrentar cargos por homicidio, robo y privación injusta de la libertad.


