La isla de Cuba recibió entre enero y julio un total de 1 millón 123 mil 987 visitantes internacionales, lo que se traduce como un 23.2% menos que el mismo periodo de 2024, según la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI).
El declive en el turismo pone en duda la posibilidad de alcanzar la meta oficial de 2.6 millones de turistas para este 2025.
Los cubanos residentes en el extranjero que viajan a la isla, que representa el segundo mayor mercado de origen, también reporta un descenso, siendo de un 21.5%.
El debilitamiento del sector turístico cubano, históricamente clave en la economía, se vincula a la crisis económica y energética que atraviesa la isla, la reducción de rutas aéreas y las sanciones estadounidenses.
A lo largo del tiempo, el turismo ha sido esencial para la planificación económica del régimen cubano por su aporte al Producto Interno Bruto (PIB) y la entrada de divisas, junto con los servicios profesionales y las remesas.
La tendencia de los primeros seis meses de este 2025 podría derivar en que ni se supere los 2.2 millones que llegaron a la isla caribeña en 2024.

