Una vez más el Crystal Palace sorprendió a los aficionados del fútbol y esta vez venció al Liverpool en la Community Shield vía tanda de penales 3 a 2.
El conjunto red fue el que golpeó primero, al revolverse en la frontal del área con gol de Ekitiké (4’). Luego Mateta (17′) empató el juego desde la vía del penal, demostrando el Palace que no iba a ponerle las cosas fáciles a los dirigidos por Arne Slot.
Sin embargo, el Liverpool volvió a golpear rápido al hacer el 1-2 Frimpong (21′). Para la segunda mitad el Crystal Palace apretó en la búsqueda de un 2-2 y lo encontró a través de Sarr (77’).
De este modo, el encuentro se fue a la tanda de penaltis. En la misma, solo Gakpo y Szoboszlai marcaron para el Liverpool, fallando Salah, Mac Allister y Harvey Elliott ante Henderson.
Para llegar a la consagración del equipo de Londres, nada más bastó con los goles de Mateta, Ismaïla, Sarr y Devenny, siendo el de éste el último, para que el título se marchase a las vitrinas de Selhurst Park.
Pese al gran partido de los millonarios fichajes reds, Florian Wirtz, Hugo Ekitiké, Jeremy Frimpong y Milos Kerkez, Liverpool no pudo y vio cómo el Crystal Palace lograba ganar la primer supercopa de su historia.

