Conductores de buses que cubren la ruta Villa Vieja–Mercado realizaron este viernes una paralización del servicio como medida de protesta ante el eterno congestionamiento vial que enfrentan a diario en la salida al oriente de la capital.
Los transportistas aseguran estar cansados de la lentitud en los trabajos viales en la zona, lo que ha convertido el recorrido en una pesadilla tanto para ellos como para los pasajeros.
Según los afectados, la situación se ha vuelto insostenible, con trayectos que deberían durar minutos extendiéndose hasta por una hora. En medio del caos, muchos usuarios han optado por caminar largas distancias para llegar a sus destinos más rápido, lo que evidencia la gravedad del problema.
Los conductores exigen una solución inmediata a las autoridades correspondientes, argumentando que ya no pueden operar con normalidad y que sus ingresos se ven afectados. Advirtieron que, de no haber respuesta, podrían mantener o extender la paralización en los próximos días.

