En una homilía cargada de críticas al rumbo que lleva el país, el cardenal Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga cuestionó este domingo la dura realidad que enfrentan miles de hondureños, mientras desde el poder se intenta vender una narrativa de progreso que no refleja la situación real.
“No hay medicinas, no hay hospitales, las escuelas están malas… y todavía nos quieren vender la idea de que vamos bien”, denunció durante su mensaje dominical.
El líder de la iglesia católica no dudó en exigir el respeto a la Constitución y al proceso electoral que se avecina, advirtiendo que, de lo contrario, “estaríamos matando al país”.
“Vemos tantos signos que nos están diciendo vamos mal, pero no los quieren ver. Ya hasta tienen la falta de vergüenza de decir que todo está bien, cuando el pueblo sufre”, aseveró.
También condenó el uso del término “fraude electoral”, que, según expresó, no debería formar parte del lenguaje político en Honduras: “Estamos llamados a la verdad, a la justicia, ese es el camino de Dios”.

