Vergüenza nacional y ridículo, esos son los únicos calificativos para nombrar lo que pasó esta noche en la sesión del Congreso Nacional, donde hubo golpes, insultos y empujones entre las bancadas.
Las consejeras Ana Paola Hall y Cossette López fueron invitadas al Congreso Nacional a ofrecer sus consideraciones, pero la comparecencia fue breve. No las dejaron hablar y su opinión fue cortada de tajo.
«Las votaciones en el CNE son colegiadas y un 2-1 es más que uno», dijo la consejera presidente antes de abandonar la cámara legislativa.
Los colectivos de Libre se metieron al hemiciclo a gritarles de todo. «No volverán, no volverán».
El presidente Luis Redondo le indicó a la seguridad que tomara cartas en el asunto y sacara los partidarios de Libertad y Refundación.
Mientras tanto, los diputados comenzaron con su penoso show de insultos, golpes y empujones. Hubo botellazos además.
La bancada de Libre tuvo que cercar a Marlon Ochoa para que ofreciera su comparecencia.

