Este miércoles se conmemora un aniversario más de la Masacre de Los Horcones, un trágico episodio ocurrido el 25 de junio de 1975 en el departamento de Olancho.
En ese hecho, 14 personas fueron asesinadas, entre ellas campesinos, estudiantes, activistas y religiosos que luchaban por la defensa del acceso a la tierra y los derechos de las comunidades rurales.
Las víctimas fueron secuestradas, torturadas y ejecutadas dentro de la hacienda “Los Horcones”, propiedad de terratenientes con vínculos al poder político y militar de la época.
Este crimen fue parte de una serie de represiones contra líderes sociales, en un contexto marcado por la persecución a los movimientos campesinos y el uso de la violencia para frenar sus demandas.
A 50 años del hecho, familiares de las víctimas, organizaciones sociales y defensores de derechos humanos realizan actividades conmemorativas en distintos puntos del país. Misas, foros, caminatas y actos simbólicos buscan mantener viva la memoria de quienes fueron silenciados por alzar la voz contra la injusticia y la desigualdad.
La Masacre de Los Horcones es considerada uno de los crímenes más atroces del siglo XX en Honduras. Su conmemoración no solo honra a las víctimas, sino que también recuerda la importancia de proteger los derechos humanos, la justicia agraria y la libertad de expresión en un país donde aún persisten amenazas similares.

