La economía está en continuo movimiento desde que la civilización inició sus primeros trueques. Desde entonces y hasta nuestros días, constantemente surgen nuevos productos y servicios, cuyos precios van variando de un periodo a otro.
En este sentido, todos los países tienen distintos parámetros con los que analizar la evolución de su economía y los fenómenos que ocurren en ella. Uno de los más habituales es la inflación, es decir, el incremento generalizado de precios que origina una disminución del poder adquisitivo de las personas mermando su capacidad de compra y ahorro.
El director de la Federación Nacional de Agricultores y Ganaderos de Honduras (Fenagh), Guillermo Cerritos, hizo una radiografía de lo que implica una inflación.
“La inflación nos está afectando a todos, al año pasado a noviembre ya se llevaba a 40 % de importación de frijol más con relación al 2021, definitivamente ocupamos políticas que motiven a los productores hondureños”, dijo Cerritos.
Honduras cerró 2022 con una inflación interanual del 9,80 % influenciada por la desaceleración en el precio de alimentos y los combustibles, informó el Banco Central (BCH).
El Índice de Precios al Consumidor (IPC) de diciembre fue 0,37 %, inferior al de noviembre (0,98 %) y al promedio de la inflación mensual (0,78 %), según el organismo estatal.
Según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) a medida que el crecimiento económico se desacelera los precios de la materia prima se debilitan, el pronostico más reciente indica que la inflación de América Latina cerrará 2023 con un 4,1 %.
