El adorable perrito inglés aprovecha sus paseos para recoger botellas de plástico que inconscientes humanos dejan tiradas. Scruff, que ya tiene 13 años, vive con sus humanos Yvonne Faulker-Grant y David Grant.
Su mamá humana lo ha entrenado muchísimo. Anteriormente amaba jugar a buscar palos que le tiraban, pero el veterinario les advirtió que esto podía ser perjudicial para su boca ahora que estaba mayor.
Sin embargo, el hermoso peludito igual quería una tarea durante los paseos, por lo que comenzó a recoger botellas plásticas. Según Yvonne: “Esto es un trabajo para él. Es un Border Collie, por lo que ama traer y recolectar diferentes cosas“
Scruff usualmente tiene dos paseos al día, uno largo por la mañana y otro más corto en las tardes. Inicialmente el perrito agarraba las botellas y jugaba con ellas, y sus humanos las dejaban ahí mismo. Pero al poco tiempo decidieron comenzar a llevarlas a su casa para reciclar ese plástico.
Según David: “Nos sentíamos culpables de dejarlas en el suelo. La gente podría pensar que nosotros mismos las habíamos botado en un primer lugar“. Una cosa que los ha impresionado es la cantidad de botellas que han encontrado por ahí tiradas.
Cuando se dieron cuenta del volumen que comenzaron a acumular, decidieron llevar la cuenta y reportar el número mensual en la página de Facebook de David. Hasta el momento, el trabajador perrito ha recogido más de 1000 botellas, las cuales están en el patio trasero del hogar de la pareja.
Actualmente están muy emocionados porque en tan solo unas semanas irán finalmente a dejarlas al reciclado. En promedio, Scruff recoge entre 4 y 5 botellas diarias, lo que al mes da un total de alrededor de 100.
“Ojalá esto envíe un mensaje positivo a la gente en el mundo para que recojan la basura y no dejen que los animales lo hagan“, dice David. Es muy importante que todos colaboremos con lo que podamos para ralentizar el cambio climático, uno de los problemas más grandes a nivel mundial.