Con una escena desgarradora se encontraron los vecinos de un edificio de apartamentos, ubicado en el barrio Cieneguita de Puerto Cortés, cuando al ingresar al inmueble se encontraron con el cuerpo sin vida de una mujer tirado en el baño, mientras su hijo de apenas dos añitos lloraba al lado del cadáver.
El hallazgo se produjo la noche de ayer martes, cuando vecinos de la zona, ante el llanto contante del niño, decidieron entrar al apartamento y descubrieron el crimen.
La víctima mortal fue identificada como Kimberly Mejía de 23 años, originaria de Choloma, Cortés, quien recientemente se había mudado al edificio.
Vecinos relataron que desde la noche del pasado sábado escucharon llorar al niño hasta en horas de la madrugada del domingo, sin embargo, en la mañana el niño salió del apartamento, debido a que la puerta estaba semiabierta, deambuló solo por el patio hasta que logró pedir comida a una vecina, quien lo alimentó pensando que su progenitora estaba dentro del inmueble.
El pequeño volvía a entrar al apartamento y eventualmente salía y pedía comida. Sin embargo, fue hasta la noche del martes que, extrañados porque la madre no atendía al niño, vecinos ingresaron al apartamento y la encontraron muerta en el baño.
Inmediatamente se avisó a las autoridades policiales, quienes llegaron a la escena y tras las investigaciones, se confirmó que la infortunada joven fue asesinada de un disparo en la cabeza la noche del pasado sábado, por lo que el menos convivió con el cuerpo de su madre durante tres días.
Un equipo de la Policía Nacional inició las investigaciones para dar con el autor de este nuevo hecho criminal en que una mujer pierde la vida de forma violenta en Honduras.
El niño fue entregado a los familiares de la infortunada jovencita.
