El Girondins de Burdeos, uno de los equipos de fútbol históricos de Francia, fue relegado este martes a tercera división debido a su situación financiera, pocas semanas después de haber descendido a segunda tras quedar último en la liga recién terminada.
La Liga de Fútbol Profesional francesa (LFP) anunció en un comunicado que el Girondins queda relegado a tercera (denominada National 1 en Francia) tras el examen de su situación financiera por la Comisión de Control de Clubs Profesionales y aplicando las normas de la Dirección Nacional de Control y Gestión (DNCG).
Se trata de un golpe muy duro contra un gran club francés, fundado en 1945 y que ha ganado seis Ligas, cuatro Copas de Francia y tres Copas de la Liga, y que fue finalista de la Copa de la UEFA de 1996. Por sus filas han pasado figuras como Zinédine Zidane o Jean Tigana.
La decisión se anunció tras una audiencia en la que participaron el propietario del club, Gérard López, y varios altos cargos de la entidad, para detallar el plan de refinanciación previsto.
Tras el anuncio de la LFP, el Girondins calificó la decisión de «brutal», en un comunicado en el que manifestó su intención de presentar una apelación.
El club arrastra problemas económicos desde hace años y el pasado verano, cuando ya atravesaba una situación crítica, fue comprado in extremis por el empresario hispano-luxemburgués Gérard López.
López se convirtió en el tercer accionista mayoritario en tres años y cuando se hizo cargo del club, en julio de 2021, estaba bajo protección judicial desde abril, cuando su anterior propietario, el fondo de inversiones estadounidense King Street, se retiró.
King Street entró en el accionariado en 2018 y se convirtió en el último accionista en 2019 tras comprar su participación a otro fondo estadounidense, GACP, pero la llegada de la pandemia -con estadios cerrados durante meses y menores ingresos televisivos de lo previsto- frustró sus previsiones económicas.