Al entrar a los próximos meses de junio y agosto, al menos 2.6 millones de personas estarán en crisis por alimentos en Honduras, según el análisis de inseguridad alimentaria aguda diciembre 2021-agosto 2022 de la Clasificación Integrada en Fases de la Seguridad Alimentaria (CIF) del Sistema de Integración Centroamericana (SICA).
Entre junio y agosto de 2022 se prevé que alrededor del 28% de la población de 9.6 millones de personas se encontrará en condiciones de crisis o emergencia, denominada fase 3 o 4 por la CIF.
Esto indica que se presentarán las peores condiciones alimentarias en relación con los períodos de diciembre de 2021 a mayo de 2022.
Los hogares en fases 3 o 4 requieren apoyo urgente con intervenciones de respuesta enfocadas en salvar vidas y medios de vida, con un plan de respuesta que incluya ayuda alimentaria, asistencia monetaria y redistribución de activos, de acuerdo con los factores clave y limitantes identificados.
DEPARTAMENTOS MÁS AFECTADOS
El departamento que tendría la mayor severidad de inseguridad alimentaria aguda en condiciones de crisis o emergencia sería Gracias a Dios (45%).
Le siguen La Paz, Lempira, Santa Bárbara (37% cada uno) e Intibucá (36%). En términos de la magnitud de crisis o emergencia, los departamentos con más población serían Cortés (408 mil), Francisco Morazán (397 mil), Yoro (226 mil), Santa Bárbara (179 mil) y Olancho (172 mil).
El análisis establece que en el calendario estacional los meses de junio a agosto corresponden al ciclo de primera, orientado prioritariamente a la siembra de maíz y frijol.
En la segunda proyección se plantea un escenario de insumos agrícolas con precios elevados. Los precios de los granos básicos mantienen una tendencia ascendente por encima del promedio de los últimos cinco años.
Esto se generará durante todo el período del hambre estacional, cuando la demanda de los hogares aumenta por el agotamiento de las reservas y la disminución de la oferta en el mercado nacional.
