Un sismo de magnitud 7.1 activó los protocolos para atender a la población del estado de Guerrero; el movimiento telúrico tuvo su epicentro en Acapulco.
La Secretaría de Protección Civil en Guerrero indicó que el sismo fue percibido a lo largo todo el estado, mayormente en las regiones Acapulco, Costa Grande, Costa Chica, Centro, Norte, de moderado a fuerte en la Tierra Caliente y Montaña.
Personal de Protección Civil y autoridades municipales realizan recorridos en los 81 municipios del estado para atender a la población en caso de ser necesario.
Reportan choques y fallas eléctricas en Acapulco El movimiento telúrico provocó que cientos de turistas y habitantes del municipio salieran de hoteles y sus casas de descanso; la Secretaría de Protección Civil de Guerrero informó que el sismo se registró a 14 km al sureste del destino turístico.
Hasta el momento se reportan cortes de energía eléctrica, fallas en el servicio telefónico y cuadros de crisis nerviosa en distintas personas.
«Me cayeron todos los vidrios cuando se me venía el tuvo y el cinturón no lo podía destrabar… se trabó, se trabó el tubo (…) todo cayó encima de mi carro», comentó Carmen Mora, una taxista que chocó su automóvil en un edificio tras el sismo.
Anteriormente, a las 19: 55 horas, en Acapulco se sintió otro temblor y aunque los primeros segundos no superó los niveles preestablecidos, generó temor entre los porteños y los turistas.
Reportan derrumbes y desalojos en Chilpancingo Tras el sismo de esta noche, en la residencia oficial Casa Guerrero, las bardas perimetrales de las puertas uno y tres sucumbieron ante el movimiento de tierra, lo que propició el despliegue de policías del estatales para resguardar el inmueble.
En la parte sur de la ciudad, en el complejo habitacional del Infonavit, decenas de familias se salieron de los departamentos que habitan en los edificios que se inauguraron en 1990; los habitantes temen que los edificios hayan sufrido daños estructurales y que durante las próximas horas o días se generen réplicas que pongan en riesgo su integridad.
Aunque existe miedo por las afectaciones del sismo, muchos de los vecinos tampoco se animan a retirarse ante posibles actos de rapiña, por eso demandan el resguardo de sus departamentos con la Policía del Estado.
«La verdad lo sentimos más fuerte que el sismo del 85», señala la señora Martha, una mujer de aproximados 60 años, quien junto con su esposo espera que llegue la vigilancia para poder retirarse a un lugar más seguro.
En el centro de la ciudad también hay afectaciones en las construcciones, entre ellos la caída de plafones en un banco, en los pilares del ayuntamiento y en el Tribuna Superior de Justicia (TSJ).
