Gerard Piqué deja atrás definitivamente la lesión que se produjo a finales del mes de noviembre y ya tiene el alta médica. El central ha entrado en la convocatoria de Ronald Koeman para el choque de Champions League de esta noche entre el Fútbol Club Barcelona y el París Saint-Germain.
Piqué ha recortado milagrosamente los plazos de recuperación, que estimaban un mínimo de cuatro meses de baja para solventar el problema que sufrió en el Wanda Metropolitano el pasado 21 de noviembre. Entonces se le diagnosticó un esguince de grado tres en el ligamento lateral interno y una rotura parcial de cruzado anterior de la rodilla derecha.
De hecho, se valoró la posibilidad de pasar por el quirófano, opción que el futbolista descartó porque le suponía perderse lo que restaba de temporada. Desde entonces, la obsesión del central catalán fue llegar a tiempo al partido de vuelta de estos octavos de final de la Champions, que se disputará el próximo 10 de marzo. Las sensaciones han sido tan buenas, que Piqué lleva probándose durante varios días y desde el sábado se ejercita con el grupo,
El técnico holandés del Barça ya anunció en la rueda de prensa previa al partido que el defensor, que llevaba cuatro días entrenando con el resto del equipo, estaba «bien». «Tenemos buenas sensaciones sobre su físico y tengo un día más para decidir si está en la lista, porque ha estado un tiempo fuera. Lo hablaremos y decidiremos mañana por la mañana», anunció este lunes. Ahora habrá que ver si Koeman le concede la titularidad o prefiere mantenerle en el banquillo, atendiendo a un hecho que no es baladí: aunque tiene el alta médica y está apto para competir, lleva tres meses sin disputar un partido, por lo que estará falto de ritmo y corre el riesgo de una recaída en un partido tan exigente como el de esta noche ante el PSG.
El alta de Piqué supone un golpe moral para el equipo, atenazado por las numerosas bajas que está padeciendo esta temporada. Además, es una opción más para Koeman, que tiene en la línea defensiva a su talón de Aquiles. El regreso de Piqué supondría reforzar la zaga con un futbolista de calidad, acostumbrado a jugar este tipo de encuentros y aumentando las posibilidades de construcción del equipo, ya que una de las grandes virtudes del central es la salida de balón jugada desde atrás, una de las carencias del equipo esta temporada. Si Piqué juega esta noche, habrá que ver la segunda elección de Koeman, que determinará qué compañero escoge para acompañarle y dictaminará la jerarquía del resto de defensores. Lenglet, Umtiti y Mingueza optarían a completar el eje de la zaga. CORTESÍAABC.ES
