Pobladores de una comunidad de Siguatepeque encontraron un cementerio clandestino con osamentas de perro la cual creen estaría siendo comercializada en los mercados de la zona.
Una buena cantidad huesos de supuestos canes fueron hallados en un lugar alejado de las comunidades, el que sirvió como destasadero con el peligro que el producto haya sido contaminado lo que puede ser peligroso para quienes consuman esa carne.
El mercado de distribución es amplio en el sector cercano a Siguatepeque ademas de otras comunidades aledañas que cuentan con una buena cantidad de población potenciales compradores y consumidores.ER
